Desde que estalló la burbuja de la vivienda del 2008, la palabra recesión toca una fibra emocional más fuerte que nunca. Y aunque hay cierto debate sobre si estamos oficialmente en una recesión en este momento, la buena noticia es que los expertos dicen que una recesión hoy probablemente sería leve y que la economía se recuperaría rápidamente. Como dice el Gerente General de Pronósticos 2022 de KPMG:
“Los Gerentes Generales a nivel mundial ven una recesión ‘suave y corta’, pero optimista sobre la economía global en un horizonte de 3 años…
Más de 8 de cada 10 anticipan una recesión en los próximos 12 meses, con más de la mitad esperando que sea leve y corta”.
Para agregar a ese sentimiento, la vivienda suele ser uno de los primeros sectores en recuperarse durante una desaceleración. Como explica Ali Wolf, Economista Principal de Zonda:
“La vivienda es tradicionalmente uno de los primeros sectores en desacelerarse a medida que la economía cambia, pero también es uno de los primeros en recuperarse”.
Parte de ese repunte está ligado a lo que históricamente ha sucedido con las tasas hipotecarias durante las recesiones. Aquí hay un vistazo a las tasas durante las desaceleraciones económicas anteriores para ayudarle a tranquilizarse.
Las tasas hipotecarias generalmente caen durante las recesiones
Los datos históricos ayudan a dar una idea de cómo una recesión podría afectar el costo de financiar una casa. Al observar las recesiones en este país que se remontan a 1980, la gráfica a continuación muestra que cada vez que la economía se desaceleraba, las tasas hipotecarias disminuían.
Fortune explica que las tasas hipotecarias generalmente caen durante una desaceleración económica:
“En las últimas cinco recesiones, las tasas hipotecarias han caído un promedio de 1.8 puntos porcentuales desde el máximo visto durante la recesión hasta el mínimo. Y en muchos casos, continuaron cayendo después, ya que lleva algún tiempo cambiar las cosas, incluso cuando la recesión ha terminado técnicamente”.
Si bien la historia no siempre se repite, podemos aprender y encontrar consuelo en las tendencias de lo que sucedió en el pasado. Si está pensando en comprar o vender una casa, puede tomar la mejor decisión trabajando con un profesional en bienes raíces de confianza. De esa manera, usted tiene asesoramiento experto sobre lo que una recesión puede significar para el mercado de la vivienda.
En conclusión,
La historia muestra que no hay que temer la palabra recesión cuando se trata del mercado de la vivienda. Si tiene preguntas sobre lo que está sucediendo hoy, comuniquémonos para que tenga consejos expertos y conocimientos en los que puede confiar.