Por generaciones, el proceso de compra y venta de la vivienda realmente nunca cambio. El propietario trataría de calcular el valor de la casa en el mercado y agregaría un poco más para darse cierto margen de negociación. Esa cifra se convertiría en el precio de venta. Los compradores entonces tratarían de determinar cuánto por debajo del precio total podían ofrecer y aun así obtener la casa. Como resultado. el precio de venta era generalmente el límite máximo de la negociación. El precio real de venta casi siempre sería algo más bajo que el precio que se pedía. Era impensable pagar más de lo que el vendedor estaba pidiendo.
Hoy es diferente.
La oferta baja récord de las casas en venta, junto con una fuerte demanda de los compradores, está llevando a un aumento en las guerras de ofertas en muchas casas. Debido a esto, hoy
las casas a menudo se venden por más del precio que se pide. En algunos casos, se venden por mucho más.
Según Lawrence Yun, Economista Principal de la Asociación Nacional de Realtors (NAR por sus siglas en inglés):
“Por cada casa en venta hay 5.1 ofertas. La mitad de las casas se están vendiendo por encima del precio que se pide para la venta”.
Es posible que deba cambiar la forma en que mira el precio de venta de una casa.
En este mercado, es probable que no pueda comprar una casa con la mentalidad anterior de negociar a un precio más bajo.
Debido a la escasez de inventario de casas en venta, muchas casas se ofrecen ahora en un ambiente de subasta en el que el mejor postor gana la casa. En una subasta real, el vendedor de un artículo está de acuerdo en aceptar la oferta más alta, y muchos vendedores establecen un precio de reserva en el artículo que están vendiendo. Un precio de reserva es la cantidad mínima que un vendedor aceptará como la oferta ganadora.
Al navegar por un mercado de la vivienda competitivo, piense en el precio que se pide por la casa como el precio de reserva en una subasta. Es el mínimo que el vendedor aceptará en muchos casos. Hoy en día, el precio de venta a menudo se está convirtiendo en el mínimo de la negociación en lugar del máximo. Por lo tanto, si realmente le gusta una casa, sabe que en última instancia puede venderse por más de lo que los vendedores están pidiendo. Por lo tanto, mientras navega por el proceso de compra de vivienda, asegúrese de conocer su presupuesto, saber lo que puede permitirse pagar y trabajar con un asesor de confianza puede ayudarle a hacer todos los movimientos correctos a medida que compra una casa.
En conclusión,
Alguien que está más familiarizado con el mercado de la vivienda del pasado que el actual puede pensar que ofrecer más por una casa que el precio que se pide es una tontería. Sin embargo, las guerras de ofertas frecuentes y competitivas están creando un ambiente de subasta en muchas transacciones de bienes raíces. Vamos a comunicarnos para que tenga un profesional en bienes raíces de confianza de su lado que le proporcione el mejor consejo sobre cómo hacer una oferta competitiva en una casa.